Después de un día sin azúcar
Falta de cambio físico: las personas que utilizan el azúcar como energía pueden experimentar una falta de energía habitual y puede aumentar la necesidad de dulces.
Después de una semana sin azúcar
Más energía, mejor sueño, aliento fresco: los efectos positivos aparecen al cabo de unos días. Un metabolismo y un nivel de azúcar en sangre más equilibrados conducen a más energía y a dormir mejor. La ropa se vuelve más holgada y el aliento se vuelve más fresco porque las bacterias orales no prosperan bien sin fuentes de azúcar.
Después de un mes sin azúcar
Menos problemas de piel, presión arterial estable, pérdida de peso: las mejoras ahora son mensurables. Se puede observar una reducción de las imperfecciones de la piel y una presión arterial más estable. La pérdida de peso también se nota.
Después de un año sin azúcar
Reducción del riesgo de enfermedades: el sentido del gusto se vuelve más refinado y los antojos de azúcar disminuyen. Evitar el azúcar a largo plazo puede reducir el riesgo de obesidad y diabetes. Un estudio estadounidense demostró que las personas que consumen bajas cantidades de azúcar tienen un 57 por ciento menos de riesgo de obesidad, un 42 por ciento menos de riesgo de diabetes, un 47 por ciento menos de riesgo de insuficiencia cardíaca y un 34 por ciento menos de riesgo de muerte prematura.
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