El nuevo jefe de Estado argentino, Milei, ya anunció una “terapia de shock”. Ahora su gobierno está devaluando la moneda nacional, el peso, en más del 50 por ciento. Además, debería implementarse un estricto programa de austeridad.
El gobierno del nuevo presidente argentino Javier Milei devalúa la moneda nacional, el peso, en más de un 50 por ciento. El ministro de Economía, Luis Caputo, dijo en un discurso televisado que el tipo de cambio oficial sería de 800 pesos por dólar. Más recientemente, un dólar valía 391 pesos. El ministro de Economía dijo que la devaluación de la moneda nacional proporcionaría un “incentivo adecuado” al sector manufacturero para aumentar la producción.
No hay nuevos contratos de construcción por parte del estado
Caputo anunció recortes a los subsidios a la energía y al transporte. El ministro dijo que el gobierno mantiene los precios artificialmente bajos en estos sectores mediante subsidios. “Pero estos subsidios no son gratuitos, los pagamos con inflación”. Caputo advirtió: “Si continuamos, inevitablemente nos dirigimos a una inflación más alta”.
El ministro también anunció que no se deberían adjudicar nuevos contratos de obras públicas. Los contratos que ya se hayan adjudicado y que aún no se hayan ejecutado deben cancelarse. De ahí que los pagos de transferencias a las provincias se reduzcan al mínimo.
Los proyectos de infraestructura deberían ser realizados por el sector privado en el futuro, afirmó Caputo. En los proyectos públicos el dinero acaba en los “bolsillos de los políticos”. Básicamente, el gobierno argentino debe superar su “adicción” a gastar más dinero del que gana, dijo Caputo.
Exigencias extremas en la campaña electoral
El presidente Millay prestó juramento como nuevo presidente de Argentina el domingo. El populista de derecha ganó las elecciones con demandas radicales de un cambio económico y político. Ante las arcas públicas vacías, el populista de derecha afirmó durante la campaña electoral que la “terapia de shock” era inevitable.
Anunció que introduciría el dólar estadounidense como moneda de curso legal, aboliría el banco central y varios ministerios y recortaría drásticamente el gasto social. Su tono ahora se ha moderado considerablemente, pero también anunció dolorosas medidas de austeridad el día de su toma de posesión.
Muchos viven en la pobreza
Argentina se encuentra en una grave crisis económica. La tasa de inflación supera el 140 por ciento y el 40 por ciento de la nación que alguna vez fue rica vive por debajo del umbral de pobreza. La segunda economía más grande de América del Sur sufre de un aparato estatal inflado, una baja productividad industrial y una gran economía sumergida que hace perder al estado muchos ingresos fiscales. La moneda nacional, el peso, sigue perdiendo valor frente al dólar estadounidense y la montaña de deuda sigue aumentando.
Anne Herberg, ART Rio de Janeiro, Tagessao, 13 de diciembre de 2023 a las 08:33
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