Chiringuitos ilegales y “playas privadas”: en Grecia está muy extendido el uso comercial de tramos de playa sin licencia. Las autoridades están tomando ahora medidas intensivas. Incluso se utilizan drones.
En su batalla contra los espacios de playa no concesionados y de uso comercial, las autoridades griegas han impuesto multas de más de 350.000 euros en cinco días. Según anunció el Ministerio de Economía en Atenas, se han cerrado tres instalaciones. En total, se recibieron “más de 1.000 quejas” sobre las playas de la isla de Corfú, la península de Calcídica, los alrededores de la capital, Atenas, y otros lugares.
A medida que los chiringuitos, las playas privadas y los bares ocupan cada vez más lugares para bañarse, las autoridades están tomando medidas contra la privatización prohibida de las playas utilizando drones, imágenes de satélite y la nueva aplicación “MyCoast”, a través de la cual cualquiera puede denunciar infracciones.
el “Movimiento de toallas” defendiéndose
En marzo, el gobierno también introdujo nuevas normas para el alquiler de tumbonas. Las sombrillas y tumbonas deberán estar a partir de ahora al menos a cuatro metros del mar. El alquiler está totalmente prohibido en playas de menos de cuatro metros de ancho. El alquiler es un negocio lucrativo: dos tumbonas y una sombrilla suelen costar entre 20 y 40 euros al día en Grecia, y mucho más en algunas islas populares.
De una estación a otra aumenta la ira de los griegos ante tales transgresiones. En el verano de 2023, un año turístico récord con 33 millones de visitantes, surgió el llamado Movimiento de las Toallas en la isla de Paros, en las Cícladas, exigiendo que se garantizara el acceso legal a la playa incluso para los huéspedes que no pagaran.
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